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¿Qué es una agencia inmobiliaria y cómo funciona?
De acuerdo con la RAE, una agencia inmobiliaria es “una empresa o sociedad que se dedica a construir, alquilar, vender y administrar viviendas”. Aunque existen inmobiliarias que se dedican de manera exclusiva a la construcción de bienes inmuebles y solo comercializan las propiedades que han sido construidas bajo su supervisión, lo cierto es el término de ‘inmobiliaria’ se utiliza mayormente en las agencias que funcionan como intermediarias a la hora de realizar una transacción en una propiedad. Es decir, son aquellas empresas que funcionan como un nexo entre la persona que quiere vender y aquella que quiere adquirir un inmueble, ya sean casas, pisos, departamentos, locales comerciales y oficinas. Del mismo modo, las inmobiliarias también pueden ser los intermediarios entre una persona que quiere arrendar un inmueble y un arrendatario potencial.
Al momento de convertirse en mediador entre ambas partes, la inmobiliaria se encargará de agilizar el proceso de compraventa, o de alquiler, al llevar a cabo todas las negociaciones pertinentes. Además de encargarse de todas las gestiones de la transacción, la inmobiliaria también cumple con la función de asesorar al cliente sobre algunas condiciones técnicas que no tengan del todo claro.
¿Qué problemas resuelve una inmobiliaria?
–Aclaran dudas: Las inmobiliarias se encargan de resolver todas las dudas de sus clientes, ya sea a través de una reunión en la agencia, por teléfono o por videollamadas. Gracias a esta rápida atención, los clientes estarán al tanto de todas las condiciones del proceso y de las fases de la transacción de forma rápida, sencilla y eficaz.
–Identifican el inmueble ideal para cada cliente: las agencias inmobiliarias se encargan de encontrar la propiedad ideal para cada cliente, cumpliendo con sus preferencias personales, su presupuesto y el uso que le darán el inmueble, por lo que buscarán viviendas, locales o terrenos que se adapten con los requerimientos de cada persona.
Aunque pueda parecer un trabajo sencillo, lo cierto es que, debido a los cambios que suele experimentar el mercado inmobiliario, esta tarea puede complicarse, por lo que los agentes pasarán varias horas revisando cuáles son las opciones que están disponibles actualmente en el mercado, realizando diversos estudios para poder ofrecer estas propiedades a los clientes. Además, se encargan de la negociación entre compradores y vendedores, realizando ofertas y contraofertas para conseguir el mejor acuerdo económico entre las partes.
-Inspeccionan las propiedades: las empresas inmobiliarias se encargarán de garantizar que todas las propiedades cumplan con todos los requisitos legales para evitar futuros inconvenientes. Esta inspección no solo se limitará a las condiciones físicas del inmueble, en la que comprobarán que la vivienda está en perfectas condiciones, sino también se encargan de revisar el registro de la propiedad, evitando con esto que los compradores sean víctimas de algún tipo de estafa. Y es que comprar una vivienda de forma libre y sin el asesoramiento de una agencia inmobiliaria puede traer algunas consecuencias como que los compradores deban hacerse cargo de deudas de agua, luz, comunidad e hipoteca del inquilino anterior.
-Publicitan las propiedades: Uno de los problemas más comunes a la hora de vender o alquilar un inmueble es la escasa publicidad de este y la lentitud a la hora de conseguir a alguien que esté interesado en la propiedad. En este caso, las inmobiliarias se encargarán de promover y publicitar la vivienda o el local comercial a través de diferentes canales de distribución: anuncios publicitarios en guías de servicio, portales inmobiliarios en redes sociales, páginas web para inmobiliarias, prensa, radio, folletos impresos, expositores locales, ferias de vivienda, exhibiciones inmobiliarias, etc. Todo este laborioso trabajo hará que el vendedor o arrendatario de la vivienda no tenga que preocuparse por difundir el anuncio de venta, haciendo mucho más fácil el proceso de conseguir compradores o posibles inquilinos.
–Obtienen la mejor financiación: No es ningún secreto que no es tarea fácil lidiar por cuenta propia con las entidades financieras, por lo que las empresas inmobiliarias se encargarán de asesorar a los compradores a la hora de conseguir y negociar las mejores condiciones de financiación e hipotecas. Además, también resuelven todas las dudas con relación a los costes de las escrituras y tasaciones, así como también valora los posibles gastos adicionales que puede tener una vivienda en cuanto a mejoras, adecuaciones y reformas que quiera hacer el comprador.
-Agilizan las transacciones: Las empresas inmobiliarias no solo se encargarán de buscar una propiedad ideal para su cliente, también le aporta un sinfín de soluciones y respuestas inmediatas para simplificar todo el proceso de venta de inmuebles o alquileres para que sea lo menos estresante posible.
¿Por qué vender tu casa con una inmobiliaria?
La principal ventaja a la hora de vender una propiedad con una inmobiliaria es poder desentenderse completamente de toda la gestión y el proceso de compraventa. Los agentes se encargarán de todo: publicar la vivienda, buscar los compradores, llevar a cabo las negociaciones, etc.
Además, la agencia inmobiliaria se encargará de asesorar a los vendedores sobre cómo deben establecer el precio adecuado de su vivienda, teniendo en cuenta algunos aspectos como la zona en la que está ubicada, las características físicas del inmueble, los años de antigüedad, las facilidades que ofrece en las áreas comunes, la extensión de la construcción, entre otras cosas. Todo esto con la finalidad de que los clientes no pierdan dinero en caso de poner un precio muy por debajo del valor real en el mercado o asesorarlos en caso de que hayan colocado un precio realmente desorbitado a su inmueble, dado que la venta será casi imposible de concretar bajo esas condiciones.
¿Qué pide una inmobiliaria para vender una casa?
Para poder vender una casa a través de una agencia inmobiliaria, se deberá tener en cuenta que este tipo de empresas se manejan a través de cobro por comisión de venta. Aunque la mayoría de las personas conocen esta información, lo cierto es que existe una idea preconcebida sobre las comisiones un tanto elevadas que exigen dichas agencias, por lo que muchas personas desisten a la hora de contratar una inmobiliaria y se arriesgan a vender su propiedad de forma libre. Sin embargo, hay que considerar todo el trabajo que realizan para garantizar una venta exitosa para sus clientes.
Teniendo en cuenta esto, hay que explicar que cada agencia inmobiliaria tiene la potestad de establecer sus honorarios, por lo que estos variarán dependiendo de la empresa que se contrate, aunque generalmente la comisión de venta suele generarse en función del precio final de venta.
De esta manera, se ha determinado que las agencias inmobiliarias tradicionales suelen cobrar una comisión que se sitúa entre un 3% y un 7% del precio de venta. Aunque también existen agencias que pueden ofrecer una comisión fija, por ejemplo, una comisión del 5% para todas las propiedades, independientemente de su valor en el mercado.
Ahora bien, también existen agencias inmobiliarias digitales en las que se establece un pago fijo si se llega a vender las propiedades. Por ejemplo: la agencia ‘Housfy’ cobra una comisión de 4.490 euros solo si se llega a vender la propiedad en un lapso no mayor de los 60 días que prometen. Así que, los costes finales dependerán de la agencia que elijas, el valor de la vivienda y el tipo de agencia que se contrate.
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Licenciada en Literatura, escritora por vocación y lectora por convicción. Amplia experiencia en redacción de ensayos críticos y artículos periodísticos en diversos medios digitales y plataformas en RRSS. Blogger y Copywriter.